¿De qué se ríe Satán?

La risa es la estética del mal ¡Ríe aquí, ríe, luminosa y saludable maldad mía!
Así habló Zaratustra

Tras al golpe del djembé invocar espíritus ocultos, sentir el flujo de los vientos sacudiendo los árboles, poseído por la vijaya. Caminaba por senderos desconocidos contemplando el caos con la sonrisa de un santo. De vuelta a la casa buena una extraña casualidad hizo explotar en mí la carcajada. Una mujer que iba algo seria se dió vuelta para mirar, yo la miré a los ojos y reí otra vez. Ella mantuvo su seriedad y siguió con lo suyo.
Quise entonces escribir estas palabras y busqué imágenes para decorarlo. Me topé con dibujos del Joker y como imágen me agradó, entonces busqué algo más. Tuve una llamada divina y tuve que salir hacia un destino trágico. Caminando me topé de frente con un tipo que tenía gran parte del brazo tatuado con el Joker.


Mi carcajada imprudente me recordó a Baudelaire, a un relato sobre los efectos del hachís en los Paraísos Artificiales. Decía que la risa eufórica provocada por el hachís bien podía ser considerada inmoral en lugares serios, adultocentricos. También recordé la asociación que se establece entre risa y locura. Y las palabras de un cura español imponiendo su fé en la Edad Media diciendo que estaba muy mal que el domingo la gente riera y bailará porque tal día debía llorarse y acongojarse. Ahora recuerdo al humorista Bill Hicks hablando de los publicistas, "están cagados y te quieren cagar a ti también". Los curas. "Primero fue el miedo / luego el miedo se hizo carne". Los curas enseñaban a temerle a la risa como a algo demoníaco, reirse de manera inmoral desfigura el rostro, uno es poseído por la irracionalidad... las ilustraciones del diablo riéndo. Recordé también el terror y los villanos de la cultura basura, los payasos asesinos. Las risas siniestras, la risa malvada, la risa diabólica. ¿De qué se rie el diablo?


La risa descontrolada de los niños que a veces llega a cortar la seriedad de los adultos. Los niños riendo en la mesa. Yo me río con ellos.
¿De qué se ríe Satan? Un amigo dice que de él, y que él es el mensajero. Otro amigo dice que de la verdad.
Lo serio es la verdad, el poder, la autoridad. Lo adulto. La razón.
La risa es absurda, como la vida misma.
La risa es coqueta. Como me deforma la mirada, como se le deforma la cara, a la güerita que me embriaga a cada carcajada.

Santificada sea la risa por Ludo en nombre de Satán. Maldita sea. Divinizada más allá del bien y del mal.
El Marqués de Sade tras la revolución francesa propuso acabar con el catolicismo y sus secuaces por medio de la burla. Dadá se río de todo y de si mismo. Maldito sea Dadá.
La risa es ingobernable (ver la Reconquista del Juego: 1, 2 y posteriores).

Tomemos la revolución en serio, a nosotros no.